10 ago 2012

Guns N' Roses Se Lucio en Bogota

El grupo estadounidense Guns N' Roses regresó a Colombia tras 18 años de ausencia con un espectáculo que superó las dos horas y llenó de júbilo a más de siete mil asistentes en el Parque Jaime Duque, cerca a Bogotá. 


Para todos era claro que las condiciones no eran las mismas que en los años noventa. En primer lugar porque Axl Rose, líder y fundador de la banda californiana, es el único miembro que se mantiene desde su creación en 1985; también porque el presente del grupo trae consigo una quijotada llamada Chinese Democracy, un disco que tardó una década en salir a la luz pública y que, sin duda, reflejó la nueva vida de esta banda ahora compuesta por un puñado de músicos jóvenes. 

EL CONCIERTO
En ese sentido, fue grato ver a Guns N' Roses en una gira inédita con material nuevo y no ser parte de un concierto de 'memorabilia' de finales del siglo XX, algo que pudo haber hecho Axl hacía tiempo con una gira de grandes éxitos.

Las especulaciones sobre el concierto estaban a la orden del día. 
Si todavía había alguien con la ilusión de ver a Axl en lycra, falda escocesa y camisetas de malla -como en el mejor momento de la banda- era muy posible que dudara de la calidad del recital sin la presencia de los guitarristas Slash, Izzy Stradlin y el bajista Duff McKagan, entre otros. Pero ese tipo de duda pasó a un segundo plano cuando sonó Welcome to the Jungle, la segunda canción de la noche y uno de los temas clave de la agrupación, que fue interpretada de manera prodigiosa por cada uno de los integrantes.

Para ese momento, el virtuosismo de Slash fue relegado por un miembro con casi el mismo talento que él, pero sin su fama.

Otra de las preocupaciones que precedió la aparición de Axl y compañía en Bogotá eran los escándalos por los retrasos y disturbios que existieron en las fechas anteriores de su paso por Suramérica. Si en Buenos Aires hubo disturbios y en Caracas demoró cuatro horas en salir al escenario, en Bogotá fueron tres pero sin problemas. 

Los Guns N' Roses subieron al escenario a las 11:50 p.m. con la canción Chinese Democracy y transcurrieron dos horas con una acertada combinación de temas reconocidos y modernos, entre los que se destacaron You Could be Mine, Sweet Child of Mine y Patience, por los viejos, y Better, Street of Dreams y Sorry, por los nuevos. 

Sin embargo, varios de los momentos más emotivos tuvieron lugar en los solos de los guitarristas Dj Ashba, Ron Bumblefoot Thal y Richard Fortus y en las canciones que no pertenecían a los Guns N' Roses, como la versión de Another Brick in the Wall, de Pink Floyd, y los conocidos Live and Let Die, de Paul McCartney, y Knockin' on Heaven's Door, de Bob Dylan. 

El público bogotano aplaudió al líder del grupo por su entrega. En medio de una garúa liviana que cayó sobre el Jaime Duque, Axl recordó lo sucedido en 1992 en El Campín, cuando se presentó por primera vez en Colombia: 'Llueve otra vez' y entonó el éxito November Rain.

Como en 1992, pero después de un repertorio más largo que el de aquel año, la banda cerró el concierto con Paradise city en el Jaime Duque. Axl Rose se despidió y dejó claro porque es uno de los roqueros más importantes de la década de los 80 y 90, y logró cautivar a un público que lo espero 3 horas. A la salida, en una fila ordenada, el público emocionado silbaba Patience.

Art. El Tiempo.

0 comentarios: